miércoles, enero 13, 2010

Entrañas de un rezo perdido


La pluma adversa escribe su tiempo

como el cádiz que se entrega vacío a la sombra del fraile

que acuesta su regazo y dibuja su propia desnudez maldita

acribillada de recuerdos

Una en la cual no hay adverbios, ni se pronuncian las horas


Los reflejos allí se encapsulan a si mismos

tratando de compaginar compases y grises magnóleos

pintados de atardecer olvidados


Con tal de que cada uno busca su plaza, su bosque y su flauta

Cada quien construye lo que es conveniente a su mirar

y a su tiempo


Entre higueras marchitas llora la estación

como pincelada madura que noa treve a herir

y cada quien escucha el llanto de aquel manzano

virtiendo su misa muda

sin más que un loco solitario


Seguramente ya no hay más palabras

y esto es un sólo rezo perdido...

sábado, enero 09, 2010

Extrañar


Extraño volver a nacer

Extraño volver a sentir que mi piel tiene tacto

y que mis ojos pueden caminar sin asperezas
Extraño sentir las palabras cerca de mi

y no como un mural lejano

impregnado de silencio y de escenas resecas
Extraño ver el campo que amarra sus encintas azules

y sus laureles carmesí

como la luna que nace y desea latir con todas sus fuerzas
Extraño no decir que mi voz se ha caido

poque ya me siento presa de sus olvidos

porque mi canto ya es una rosa casi marchita

No confundan los clamores

esto no es sólo de aquel camino rosa

también es del camino blanco

el que acompaña en tiempos de penuria
Pero en ninguno de aquellos caminos

mi voz ha podido ser acompañada

Quizás ya han olvidado que extraño poder sentir
Porque extraño despertar en mi propia habitación y en mis únicas prosas

No quiero tomar el camino de la blanca elección porque sería olvidar que extraño.

Que extraño mirar.

lunes, enero 04, 2010

Oración del olvido


Ora por mi ora por que no acontezca mi muerte entre mis labios azulados entre mis campos que buscan la esquela perfecta


Ora por mis matices que plasmo ante la acuarela que da la vida innegable de crear mi prosa ausente


Ora por no enterrar mis lágrimas en un vacío de uvas negras que solamente retraten el perfil de una sombra solitaria de grises y violeta de senderos marchitos Ora por que mi hora no sea hora de olvido y que pueda secar tus lágrimas para unir tu dolor a mi y no dejar vacío tu pequeño sendero porque mis labios también unieron su tiempo con el tuyo aunque nuestras dos imágenes no existan


Ora porque mis faroles sean aguja eterna que puedan llevar lejos los estertores vacíos de mi silencio y poder pronunciar nuevamente mi niñez dormida en mis pasos y en mi voz

Ora para que mis labios abran las flores de mi rosal y sus espinas sean seda para nuestros caminos para que en mis labios también halla deseo innegable y puro

Desde el Edén al Jordán, entregar en mi propio rezo una mirada tan única para verte aunque no sepa de ti Ora para que pueda escribir estas horas con tu mano escribiendo la mia.

viernes, enero 01, 2010

Luna Amatista


Le pides un beso a aquella luna. ¿Pero sabes que ella es como un fruto pohibido en manos de Maria Magdalena. ? ¿ Me preguntas entonces porqué digo que es un fruto prohibido? No, no es por su forma. Es por su esencia. Bastante herido es aquella mano que recoge sus tristezas para destruir aún más su verso.

Nuestro tiempo ya está vacío en aquella copa. Las dos caras de la moneda se encuentran equidistantes por hebras vacías de tiempo.

No me busques, por que aquellos brazos me han raptado al olvido. Busca aquella nueva hoja de papel y plásmala para que vuelva a nacer. Pero deberás darme nuevamente lirios y rosas para sentir, y reconstruir el color de mis ojos para ver nuevamente la luna amatista que dibujan mis manos.

No deberás herir con hora señalada mis labios, aunque quizás ya lo hayas hecho antes de hacerlo. Pero no podrás verme nacer si de nuevo hieres mi cuento. Por que es mi única existencia.
Aunque si lo quisieras, podrías dejarme sólo al olvido de un borrar. Borrar para despertar ante un Lunes desierto...